El Ayuntamiento de La Laguna, a través de la Concejalía de Obras e Infraestructuras, ha iniciado los trabajos de mejora de la accesibilidad en la calle Marosilla, en La Cuesta, con la ampliación de las aceras que conducen a la zona de canchas deportivas del colegio Ramiro de Maeztu, en un tramo de unos 50 metros, así como mediante el rebaje de bordillos en los pasos de peatones. La actuación, con un plazo estimado de ejecución de dos semanas, se incluye dentro del proyecto de refuerzo de firme en las vías de la zona Metropolitana y Montañas.  

Tanto el alcalde, Luis Yeray Gutiérrez, como el edil responsable del área, Adolfo Cordobés, han reiterado “el compromiso del grupo de Gobierno con la mejora de la accesibilidad del municipio, atendiendo la necesidad de facilitar el tránsito en aquellas calles en las que la estrechez del actual acerado supone una dificultad para las personas con movilidad reducida y un riesgo para la seguridad vial”. 

Adolfo Cordobés indica que se trata de una calle muy transitada, ya que además del colegio Ramiro de Maeztu en el mismo entorno se ubican el complejo Deportivo y el área de Servicios Sociales de La Cuesta y recuerda que, dentro de la mejora integral de la zona, en el primer semestre del año el Ayuntamiento acometió la repavimentación de la calle Piloto Néstor Jorge Cabrera, que permite el acceso a la calle Marosilla desde la Avenida de los Menceyes. 

Desde el área de Obras e Infraestructuras también se están llevando actuaciones similares en el Camino de la Piterita, en la intersección con la Avenida de Las Palmeras, “para facilitar el paso peatonal en ese punto estratégico de Finca España”, asegura el concejal, además de en el cruce de la Avenida de San Diego con Paseo Oramas. También se están ejecutando rebajes de aceras en la Avenida La Unión, la calle Progreso y Camino San Bartolomé de Geneto, en Guajara, previo a las obras de repavimentación de estas calles, que se acometerán en las próximas semanas, con el fin de “seguir avanzando hacia un municipio universalmente accesible”, concluye Adolfo Cordobés.