La Laguna, presente en la conferencia de la Plataforma para la Gestión de Riesgos Geológicos en la región atlántica
Las Montañas de Anaga han sido la localización escogida en Tenerife para la creación del Observatorio Ciudadano sobre desprendimientos de rocas y sus desencadenantes en Canarias, un proyecto piloto que quiere involucrar e incorporar el conocimiento de la población
La Laguna participa en la conferencia final de la Plataforma para la Gestión de Riesgos Geológicos en la región atlántica (AGEO, por sus siglas en inglés), un proyecto financiado por el programa Interreg Espacio Atlántico, cuyo objetivo es explorar nuevas formas de compromiso entre la sociedad civil y autoridades locales para avanzar en la prevención de estas amenazas y que se está desarrollando desde hoy en Lisboa. El municipio se ha integrado en un proyecto piloto que, desde hace casi dos años, ha estado recogiendo información sobre los riesgos de desprendimientos de rocas en el ámbito municipal del Parque Rural de Anaga, con una apuesta por involucrar y recoger los conocimientos y experiencias de la población para mejorar la base de datos nacional y europea, además de reforzar la seguridad en una zona montañosa susceptible de sufrir desprendimientos de rocas, con residentes en poblaciones distantes y que recibe una gran afluencia de visitantes.
El concejal de Medio Ambiente y Lucha contra el Cambio Climático, José Luis Hernández, ha sido invitado, en representación de la localidad, para la sesión de exposición de resultados de este proyecto piloto, que se ha estado desarrollando en cinco países europeos, concretamente en Causeway Coast (Irlanda del Norte), Lisboa y Madeira (Portugal), Bretaña (Francia) y, en España, únicamente en Canarias, concretamente en los caseríos de las Montañas de Anaga (Las Carboneras, Chinamada, El Batán, Bejía y El Río Cabeza de Toro), así como en localizaciones de El Hierro y Gran Canaria.
Cabe recordar que estos caseríos se ubican en un extenso territorio marcado por el paisaje abrupto y de profundos barrancos característico del macizo de Anaga, pueblos que sufren un proceso de despoblación y donde vecinos, vecinas y diferentes instituciones tratan de conciliar las necesidades contemporáneas con el desarrollo social y la protección del medio ambiente.
En España, el proyecto piloto ha estado liderado por el Instituto Geológico y Minero de España (IGME), junto a la Universidad de La Laguna (ULL) y La Palma Research Center, con la colaboración de la citada Área del Ayuntamiento de La Laguna, y ha permitido la creación de un Observatorio Ciudadano sobre desprendimientos de rocas y sus desencadenantes en las Islas Canarias.
Asimismo, AGEO se ha estado desarrollando mediante un consorcio con la Universidad de Lisboa, como asociado principal, y doce más de cinco países europeos (España, Francia, Irlanda, Portugal y Reino Unido), entre los que se encuentran, además de los ya citados de España, la Asociación Portuguesa de Geólogos, Cerema, el Laboratorio Nacional de Energía y Geología de España, el Laboratorio Nacional de Ingeniería civil portugués, el British Geological Survey, la Universidad de Bretaña Occidental, la Universidad de Madeira, el University College en Dublín y la Cámara Municipal de Lisboa.
Más cooperación
La región atlántica está expuesta a una serie de eventos de baja probabilidad y alto impacto, y a diversos escenarios de riesgo que, debido a la baja probabilidad de ocurrencia y/o el alto coste de la acción mitigadora, carecen del nivel de preparación necesario para un seguimiento y una respuesta eficaces. AGEO tiene como objetivo probar una nueva forma de cooperación entre sociedad civil y autoridades locales para la creación de una respuesta local a los riesgos geológicos y fomentar el uso local de productos y servicios innovadores de observación de la Tierra proporcionados por las infraestructuras de datos europeas, en particular Copérnico.
El proyecto muestra cómo la participación de la ciudadanía en la prevención de los riesgos geológicos puede fortalecer los sistemas nacionales y que esta constituye un factor clave para mejorar la resiliencia del territorio frente a los riesgos de origen natural. Además, ha trabajado en involucrar a las comunidades locales para participar activamente en la preparación y el seguimiento de riesgos, e incorporar las capacidades locales en los sistemas de gestión, de forma que los datos aportados por los vecinos y vecinas mejorarán los que ya existen, facilitando una mejor comprensión y evaluación de los riesgos.
Las experiencias adquiridas durante la puesta en marcha de estos proyectos piloto se utilizarán para formular recomendaciones para la creación de futuros observatorios en respuesta a la más amplia gama de peligros (tanto naturales como inducidos por el ser humano) en la región atlántica. Asimismo, el proyecto fomentará un uso más eficiente de datos, productos y servicios de Copérnico a nivel regional.
Los observatorios ciudadanos se basan en la ciencia ciudadana, que se refiere a la participación del público general en actividades de investigación científica y donde los ciudadanos y ciudadanas contribuyen activamente a la ciencia, ya sea con su esfuerzo intelectual, su conocimiento del medio o con sus herramientas y recursos. Las personas participantes proporcionan datos experimentales e infraestructuras para los equipos de investigadores, presentan nuevas preguntas y colaboran a la creación de la cultura científica.
Las personas voluntarias también adquieren nuevas habilidades y mejoran sus conocimientos del trabajo científico de una manera atractiva. Como resultado de este escenario transdisciplinar y abierto, se mejoran las interacciones entre la política, la sociedad y la ciencia, creando una capacidad de decisión basada en la investigación democrática y las pruebas empíricas que prevenga los riesgos de derrumbe asociados con fenómenos naturales como la lluvia, el viento o los movimientos sísmicos.
Financiación
AGEO es un proyecto financiado por el programa Interreg Espacio Atlántico, un instrumento de financiación de la Cooperación Territorial Europea que apoya proyectos de cooperación transnacional entre actores del espacio Atlántico, a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). El proyecto tiene un presupuesto total de 3.223.240,32 € de los que 2.417.430,24 € están financiados por el fondo FEDER.
AGEO trabaja bajo la prioridad 3: fortalecer la resiliencia del territorio frente a los riesgos de origen natural, climático y humano. Esta prioridad promueve una mejor gestión del medio ambiente, de modo que las autoridades regionales y las partes interesadas pertinentes estén mejor preparadas para adaptarse al cambio climático y a los riesgos potenciales que se producen en el territorio.